Opinión

HERRAMIENTAS SIN USO, SE OXIDAN RECONQUISTA DE PRESTACIONES Y AMPLIACIÒN DE DERECHOS SINDICALES CON LA HUELGA AUTOMOTRIZ UAW.

Por: Andrés Peñaloza Méndez

Escrutinio sindical del acuerdo provisional con Ford.

El pasado 2 de noviembre 3,087 personas trabajadoras, el 82% de los miembros del icónico Local 900 del sindicato de trabajadores automotrices de los Estados Unidos (United Auto Workers, UAW, por sus siglas en inglés) en la planta de ensamblaje de Ford en Michigan votaron por la ratificación del nuevo contrato colectivo con la empresa fundada por Henry Ford el 16 de junio de 1903. 

Los integrantes del Local 900, quienes ayudaron a estallar la huelga el 15 de septiembre y fuera el primer local de Ford en hacer huelga en décadas, decidieron suspender, tras 41 días, la huelga de pie (Stand Up Strike) en tanto se lleven a cabo las votaciones para la ratificación del acuerdo tentativo con Ford, el primero de los Tres Grandes fabricantes de automóviles en llegar a un acuerdo con el UAW.

Seguir el proceso de ratificación es interesante para analizar y calificar la calidad democrática de deliberación de los sindicalistas de la UAW. El 13 de noviembre en la página de Facebook del Local 862 (donde están los trabajadores de producción de las plantas de ensamblaje de Louisville y de camionetas de Kentucky de Ford), se reportan los resultados arrojados en las reuniones para ratificar el contrato negociado: en el área de producción: 55% votaron a favor, pero en los departamentos de oficios especializados o cualificados fue rechazado por el 69%. 

Al momento, dos terceras partes de la base trabajadora de las 54 plantas, agrupada en 38 locales de la UAW-Ford, han participado en la consulta para aceptar o desechar el nuevo contrato, aunque todavía falta el escrutinio en algunas de las principales plantas de la empresa, incluida la de camionetas de Dearborn, en Michigan.1

Acuerdo provisional con Ford

En lugar de un paro que afecte a todos los miembros del sindicato o una huelga de brazos caídos o de sentados (Sit-Down Strike), como la histórica huelga de 44 días ocurrida entre 1936-1937; parteaguas sindical no sólo por lograr el reconocimiento de la UAW por parte de General Motors, sino al provocar una oleada de organización sindical y replantear las relaciones obrero-patronales en los Estados Unidos y allende sus fronteras2. La reciente huelga de la UAW reflejó una nueva estrategia de lucha obrera donde la participación es selectivamente planeada, escalonada y acordada democráticamente por el sindicato. 

La inteligente comunicación, la entusiasta participación de la base trabajadora de la UAW; además, de la solidaridad social y política suscitada permitieron alcanzar acuerdos, posiblemente inaugurales de una nueva etapa del sindicalismo internacional siempre y cuando exista la decisión de abandonar la subordinación intrínseca en la llamada paz laboral y del control patronal de los sindicatos. Al anunciar algunos detalles del acuerdo y describir los próximos pasos en el proceso de ratificación el presidente de la UAW, Shawn Fain, afirmó: 

Durante meses hemos dicho que ganancias récord significan contratos récord. Y, familia UAW, nuestra huelga de pie ha cumplido. Lo que comenzó en tres plantas a la medianoche del 15 de septiembre se ha convertido en un movimiento nacional (…) Ganamos cosas que nadie creía posibles. Desde que comenzó la huelga, Ford puso sobre la mesa un 50% más que cuando salimos. Este acuerdo nos sitúa en un nuevo camino para hacer las cosas bien en Ford, en las Tres Grandes y en todo el sector automovilístico. Juntos, estamos cambiando el rumbo de la clase trabajadora en este país

A su vez, Chuck Browning, vicepresidente de la UAW, indico: 

Nuestro sindicato se ha unido de una manera que no habíamos visto en años. Desde los Grandes Lagos hasta el Golfo de México, nuestros miembros se unieron para decirle a los Tres Grandes con una sola voz que ganancias récord significan un contrato récord (…) Gracias al poder de nuestros miembros en los piquetes y a la amenaza de más huelgas en el futuro, hemos conseguido el acuerdo más lucrativo por miembro desde que Walter Reuther fue presidente. 3

Los beneficios se estiman en más de cuatro veces las ganancias del contrato de 2019 y proporcionan más aumentos salariales base de los recibidos en los últimos 22 años. El acuerdo otorga un 25% en alzas del salario base hasta abril de 2028 (monto por encima del 9% ofrecido por la Ford al inicio de las negociaciones), y aumentará acumulativamente el salario máximo superior al 30%, más de $40 dólares por hora, e incrementará el salario inicial en los nuevos contratos un 68%, de $16.78 dólares la hora a más de $28.

Los trabajadores peor pagados de Ford mejorarán sus ingresos en más del 150% durante la vigencia del acuerdo, y algunos trabajadores recibirán un aumento inmediato del 85% inmediatamente después de la ratificación.

Se restablecen importantes beneficios perdidos durante la Gran Recesión de 2009, incluidos los subsidios por costo de vida y una progresión salarial de tres años, además de eliminar los niveles salariales divisivos en el sindicato[4]. Mejora la jubilación de los jubilados actuales, los trabajadores con pensiones y los que tienen planes 401 (k)[5]. También incluye un derecho histórico a la huelga por el cierre de plantas, una novedad para el sindicato.

Poco después del acuerdo con Ford, el sindicato también llegó a acuerdos provisionales similares con Stellantis y General Motors.

Las herramientas sin uso suelen oxidarse. Ocurre con el derecho de huelga, conquista proletaria para defender derechos y ampliarlos. Con la ofensiva patronal durante los duros años neoliberales se impuso una pax laboral para contener el ejercicio del derecho de huelga mientras cercenaban prestaciones y se abatían salarios bajo el argumento de salvar las fuentes de empleo preservando a los corporativos en bancarrota inyectándoles cuantiosos recursos públicos.

Los acuerdos alcanzados por la huelga “de pie” emprendida por el sindicato que representa a los trabajadores de los sectores del automóvil, aeroespacial y de producción de maquinaria agrícola en los Estados Unidos, la UAW, contra los Tres Grandes monopolios automotrices (Ford, General Motors y Stellantis), aleccionan para recuperar el derecho de huelga y ejercerlo para independizarse del control patronal, recuperar prestaciones perdidas, mejorar salarios y jubilaciones; incluso, empoderar a las y los trabajadores organizados para incidir en las políticas de las empresas, de sus comunidades y en el ámbito económico. Lo que sigue con visión internacionalista es pugnar para que en la región del Tratado de Libre Comercio México, Estados Unidos y Canadá (TMEC), se establezca un salario mínimo y un sistema de remuneraciones sectoriales de carácter regional tendientes a estrechar las asimetrías salariales. En el sector automotriz el mismo trabajo desempeñado en Estados Unidos y México, puede significar una abismal diferencia. El salario de un obrero en la Ford Cuautitlán, Estado de México, inicia con un pago por hora de $43.02 (2.47 dólares), ganando al día $344.16 pesos (19.77 dólares)[6]. Con el alza salarial del 68%, el trabajador(a) de nuevo ingreso de la Ford en los Estados Unidos, pasa de $16.78 dólares la hora a más de $28. Una brecha superior de ingresos discurriendo de siete a casi doce veces, respecto a los salarios pagados en México.

 

  1. El proceso de ratificación será interesante analizar para calificar la calidad democrática de deliberación de los sindicalistas de la UAW. El 13 de noviembre el Facebook del Local 862 Fuente: https://www.facebook.com/photo/?fbid=857299849730739&set=a.495640835896644&locale=es_LA
  2. La Sit-Down Strikes calificada como «la huelga que dio la vuelta al mundo», fue el primer gran conflicto laboral de la industria automotriz estadunidense. Huelga novedosa pues los trabajadores al permanecer al interior de las plantas impidieron su reemplazo por esquiroles además de protegerse de las inclemencias del tiempo; concluyó cuando General Motors, entonces el principal fabricante del orbe, firmó un contrato con el sindicato United Auto Workers, el 11 de febrero de 1937. La victoria de la UAW contribuyó a la sindicalización de Chrysler en 1939 y de Ford en 1941.
  3. [1] Las referencias a las declaraciones de los lideres sindicales están en los comunicados de prensa. Fuente: https://uaw.org/press/press-releases/
  4. [1] A los trabajadores de nuevo ingreso se les solía pagar un 44% menos en comparación con los trabajadores de base reconocidos en el escalafón.
  5. [1] Un plan 401(k) es un plan calificado de compensación diferida, donde se puede optar por aportaciones patronales de una parte de la compensación del trabajador(a) en efectivo al plan antes de retenerle los impuestos. Por lo general, las compensaciones diferidas (denominados aportaciones electivas) no están sujetas a la retención del impuesto sobre el ingreso al momento de diferirlos y si no los declara como salario en la Declaración de Impuestos de los Estados Unidos Sobre los Ingresos Personales, o en la Declaración de Impuestos de los Estados Unidos para Personas de 65 años de Edad o Más, ya que no se incluyeron como salarios. Sin embargo, se incluyen como salarios sujetos a la retención de impuestos al Seguro Social y al Medicare. Además, su empleador tiene que declarar las contribuciones electivas como salarios sujetos a impuestos federales para el desempleo. Algunos planes también le permiten a usted optar por realizar las aportaciones electivas después de impuestos como aportaciones designadas como Roth. Fuente: https://www.irs.gov/es/taxtopics/tc424#:~:text=Un%20plan%20401(k)%20es,antes%20de%20retenerle%20los %20impuestos.
  6. [1] Fuente: https://www.izquierdadiario.es/Ford-aumenta-sueldo-a-8000-obreros-en-Detroit-mientras-despidemasivamente-en-Cuautitlan

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