De México para el mundo: HOCICO
Tenía aproximadamente 16 años cuando escuché por primera vez a Hocico, regresaba a Querétaro después de un fallido intento por concluir mis estudios de secundaria en el Estado de México, en la secundaria técnica número 78, una de las más violentas en aquellos años gobernados por el corrupto Arturo Montiel. Por aquellas épocas y para horror de los y las mexiquenses, comenzaban las desapariciones de mujeres “el horror, el horror” refiere el Coronel Kurtz interpretado por Marlon Brando en Apocalypse Now de 1979.
Si, fue el horror de nuestras tierras lo que dio vida a la banda mexicana más reconocida en el mundo entero. Erk Aicrag y Racso Agroyam concretaron el proyecto en el año 1993, acompañados de sonidos electrónicos en ocasiones ambientales y otras veces desgarrantes, las letras reflejan las distintas violencias de esas épocas en un ambiente obscuro y desolado, pero sin dejar de ser rítmico e innovador. Las letras aún reflejan el ahora. El surgimiento de la banda está cargado de simbolismo, entre figuras que rechazan la religión, hasta gritos desgarradores que cuestionan la existencia de un Dios pasando por la incertidumbre de lo que significa existir en una de las ciudades más grandes y contaminadas del mundo –como lo refieren en el DVD “A través de mundos que arden”- la Ciudad de México.
Hocico fue pionero en el género EBM, Agrotech, Hard Electro o Electro Dark en el mundo entero al mismo tiempo que Cenobita, sus más de 20 discos hablan de lo sólido de su carrera musical además de ser testimonios de la consolidación de una de las bandas más importantes que ha dado nuestro país.
La música de Hocico en nuestro país marcó un punto y aparte: por un lado la música que se comercializaba con el estigma de “lo pop”, lo que se escuchaba en la radio, lo que se vendía y también, lo que se compraba y, por otro lado; lo obscuro de lo sonoro, lo que no quieren que sea escuchado, lo que se esconde, lo que permanece oculto y que en determinado momento se eleva para ser proyectado de manera internacional. Hocico es hijo de lo caduco de un modelo en el que para comprobar y solidificar la “calidad” de tu trabajo tiene que pasar por el escrutinio de otros países, así lo hicieron y engrandecieron el nombre de México ante miles de oyentes que se enamoraron del sonido brutal pero exquisito de los mexicanos.
Hocico abrió la posibilidad para que más bandas del genero fueran reconocidas en Europa como lo es Amduscia y C-lekktor. A casi 30 años de su formación la banda mexicana es un ejemplo de la originalidad y creatividad que nuestro país tiene por aportar.
En opinión de Alberto Jurado.
