La informalidad, anclada en la economía mexicana.
Por: Andrés Peñaloza Méndez.
Informalidad laboral y la jornada de trabajo
México, encabeza los listados de las naciones que más horas trabajan, menos pagan y los de mayor desigualdad en el reparto de la riqueza. Esta situación poco o nada ha cambiado.
Los oligarcas, obtienen ganancias, como nunca antes. El salario mínimo apenas se equiparó al existente en Guatemala y sigue muy distante de un salario constitucional. La patronal y su elite política se niegan abiertamente o acicalan su rechazo, pidiendo más tiempo, para discutir la reducción de la centenaria jornada laboral de 48 horas semanales a una de cuarenta con dos días de asueto.
La reducción de la jornada laboral, debe desvincularse de su atrasado pasado, proyectarse hacia el porvenir develando su singularidad en la dinámica de transformación de las condiciones de producción y de trabajo unida al despliegue de nuevas técnicas. Se trata de una reforma de gran calado, fundamental para provocar inversiones productivas y en innovación tecnológica, tendientes a generar empleos decentes, mejoras salariales y en prestaciones; formación y desarrollo de capacidades técnicas de la clase trabajadora.
Entre tanto no se cambie la visión de la aldea globalizada, los problemas estructurales del país se afianzan o profundizan, como ocurre con la población ocupada en la informalidad laboral la cual contempla, tanto a las personas trabajando en micronegocios no registrados o en unidades económicas frágiles, con condiciones laborales precarias; así como, a las personas donde el vínculo o dependencia laboral con su fuente de trabajo esta desvanecido; son modalidades de ocupación por cuenta propia en la agricultura de subsistencia, así como a quienes laboran sin seguridad social.
En octubre de 2023, la población ocupada en la informalidad laboral fue de 32.9 millones de personas y la tasa de informalidad laboral 1 (TIL1) alcanzó el 55.4 % de la población ocupada. Este porcentaje es superior en el caso de las mujeres (56.2%) respecto al promedio y a la ocupación masculina (54.8%).[1]
Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), 2023.
La ocupación en el sector informal incluye a las personas laborando en negocios no agropecuarios que funcionan a partir de los recursos del hogar, o de la persona que encabeza la actividad, sin reunir empero, los mínimos contables y jurídicos, para conformarse como empresa; su operación es pequeña y difícilmente identificable e independiente del hogar o persona que la dirige. En este ámbito, la población ocupada sumó 16.9 millones de personas y significó 28.4% de la población ocupada —tasa de ocupación en el sector informal 1 (tosi1)—, repunte de 0.5 puntos porcentuales al del año previo y en el caso de las mujeres, la situación no varía.
Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), 2023
Cuadro 2: Población ocupada, según sexo y condición de informalidad
Octubre de 2023
| Condición de informalidad | Total | Hombres | Mujeres | Total | Hombres | Mujeres |
| Absolutos | Relativos a/ | |||||
| Total | 59 410 486 | 35 496 747 | 23 913 739 | 100.0 | 100.0 | 100.0 |
| Ocupación formal | 26 493 613 | 16 028 250 | 10 465 363 | 44.6 | 45.2 | 43.8 |
| Ocupación informal | 32 916 873 | 19 468 497 | 13 448 376 | 55.4 | 54.8 | 56.2 |
| Sector informal | 16 855 086 | 9 836 211 | 7 018 875 | 28.4 | 27.7 | 29.4 |
| Fuera del sector informal | 16 061 787 | 9 632 286 | 6 429 501 | 27.0 | 27.1 | 26.9 |
Fuente: inegi. Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (enoe), 2023
La informalidad, expresión de precarización.
La informalidad se ha anclado en la estructura econòmica del pais. Los resultados sobre la “Medición de la Economía Informal, 2019 Preliminar. Año Base 2013”[2], asì nos lo indican.
El objetivo de esta medición es la actualizaciòn del Valor Agregado Bruto de la Economía Informal[3] para describir su curso y participaciòn al Producto Interno Bruto del país.
Comportamiento y participación de la informalidad en la economía
A lo largo del periodo (2003-2019) se aprecia un comportamiento ligeramente a la baja de la Economía Informal desde el 2014. Empero, su contribuciòn al PIB, repunta con el 23.0%, en el año de 2019, luego de un lustro de descenso.
Grafica 3.
*P Cifras preliminares
Entre los componentes de la Economía Informal, se observa que para 2019 el Sector Informal aumento 0.4 puntos en su tasa de participación en el Valor Agregado Bruto con respecto al año previo, mientras las Otras Modalidades de la Informalidad, incrementaron en 0.1 puntos su participación.
A lo largo del periodo 2003-2019, las Otras Modalidades de la Informalidad contribuìan en mayor proporcion al PIB (12.3%), pero a travès de los años fue declinando su participaciòn en 0.8 puntos, al grado de igualarse pràcticamente al Sector Informal, con el 11.5%.
Grafica 4
*P Cifras preliminares
Analizando en conjunto la contribución al PIB y el número de puestos de trabajo tanto del Sector Informal como del Empleo Informal en el Sector Formal, se tiene que en 2019, el Sector Informal contribuye al PIB con el 11.5%, ocupando el 27.7% del Empleo, en tanto que las Otras Modalidades de la Informalidad aportan el 11.5% al PIB y ocupa el 28.8% del Empleo.
Grafica 5.
Conclusiones
La economía formal aporta el 77% del PIB, pero emplea menos de la mitad de la población trabajadora, el 43.5%. En cambio, la economía informal es la esfera donde se emplea el 56.5% de la población ocupada, aportando el 23% del PIB.
Se deduce de los anteriores datos, la urgencia de abatir la ocupación informal para incrementar los empleos formales, acorde a la legislación laboral mexicana. Un paso necesario para romper con el círculo de precariedad y acrecentar la productividad.
Sobra decir, que la apuesta al libre mercado ha mostrado su inutilidad. Ha desbordado la informalidad y constriñe un porvenir de bienestar. Habrá, en consecuencia, que estimular la formalización a través del fortalecimiento de las economías sociales y solidarias, con subvenciones y subsidios directos en salarios, capacitación, equipamiento, tecnología, servicios e insumos.
Más allá de la propaganda conservadora y liberal progresista, la dinámica económica del país depende crecientemente de los caprichos del capital y de sus mercados liberalizados. Lejos de desprenderse del neoliberalismo la burguesía mexicana se viste con ropajes socialdemócratas del estado de bienestar. Una combinación chabacana, como sus resultados.
Las soluciones a los problemas, en especial los de carácter estructural expresión de nuestro subdesarrollo, aun cuando se nos clasifique como doceava economía mundial, son predominantemente de mercado; si acaso, con tímidas intervenciones gubernamentales (por escandalosas que algunas puedan presentarse).
Limpiar el cochinero del antiguo régimen, contener la conflictividad social y tender segundos pisos con derecho de peaje para quienes reconfiguran la clase dominante dominada, no es la solución de México.
Otra economía es posible, y no está en la informalidad precarizada y normalizada, sino en las economías sociales y solidarias, en la recuperación de los bienes comunes; en el desarrollo de fuerzas productivas enmarcadas en nuevas relaciones sociales asentadas en democracias participativas y protagónicas que enlacen programas mínimos de reformas sociales y económicas para el bienestar articulados con programas máximos post capitalistas.
[1] Resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), generados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), correspondiente al mes de octubre de 2023.
[2] Esta medición se rige por los lineamientos internacionales del Sistema de Cuentas Nacionales (SCN) 2008 de Naciones Unidas, el manual de la Medición de la Informalidad de la Organización Internacional del Trabajo 2012 y del Manual de la Economía No Observada (OCDE, FMI, OIT, ISTAT)
[2] La Economía Informal comprende al Sector Informal (micronegocios urbanos que no cuentan con los registros tributarios y jurídicos básicos para operar) y las “Otras Modalidades de la Informalidad” (la agricultura de subsistencia, el servicio doméstico remunerado de los hogares, así como todas las variedades de trabajo en negocios registrados o formales, pero bajo condiciones de desprotección laboral y de seguridad social).
SIC mx
