LA REGLA DE ORO: NI HUEVONES, NI RATEROS, NI PENDEJOS.
Por: Agustín Escobar Ledesma.
Como estaba cantado, ante cientos de panistas, priistas y algunos perredistas desclasados, el domingo 3 de septiembre, Xóchitl Gálvez Ruiz, fue ungida abanderada del Frente Amplio por México.
Surgida de un proceso interno en el que la consulta ciudadana fue relegada al archivo de los propósitos, la panista que ha destacado en el Senado de la República por disfrazarse de dinosaurio, sin abandonar las expresiones que la caracterizan, dio a conocer la regla de oro sobre lo que espera de sus colaboradores, en caso de ganar la contienda a la presidencia de la República: “Ni huevones, ni rateros, ni pendejos”, sentencia que más bien pareció la soga en la casa del ahorcado.
Xóchitl Gálvez Ruiz es originaria de una comunidad de raíces otomíes del Valle del Mezquital, Hidalgo quien, gracias a que, al parecer, vendía alrededor de seiscientas gelatinas diarias, pudo estudiar la secundaria y, años después, se graduó en la UNAM en ingeniería en computación, especializándose en inteligencia artificial y robótica.
Hasta el momento no sabemos si con los dividendos de la venta de gelatinas, en 1992, fundó la empresa High Tech Services, dedicada al desarrollo de proyectos de alta tecnología dirigidos al diseño de edificios y áreas inteligentes.
Lo que sí sabemos es que, desde que Xóchitl Gálvez incursionó en el ámbito político, ha tenido un importante crecimiento como empresaria, al obtener contratos millonarios, sobre todo, cuando fue Jefa Delegacional en Miguel Hidalgo, de la Ciudad de México, entre 2015 y 2018.
Los contratos millonarios que la beneficiaron fueron dados a conocer durante una conferencia mañanera por Andrés Manuel López Obrador, sin embargo, la revelación provocó la censura del INE, para que el presidente no hablara más del tema, a riesgo de ser acusado de violencia política en razón de género.
En 2003, durante la administración de Vicente Fox Quesada, éste designó a Xóchitl Gálvez, al frente de la entonces Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, nombramiento a todas luces improvisado, debido a que su perfil de empresaria no correspondía al de un área tan sensible que se ocupa de las necesidades históricas de los pueblos originarios.
Y es que el gobierno de Vicente Fox se caracterizó por improvisaciones y ocurrencias, recordemos que, cuando fue candidato a la presidencia de la República, alardeó que en quince minutos resolvería el conflicto con el Ejército Zapatista de Liberación Nacional.
Por cierto, en aquel sexenio hubo otro nombramiento muy cuestionado, cuando al frente de la Dirección General de Culturas Populares, estuvo Carla Rochín Nieto, quien poco a nada tenía que ver con la institución dado que era egresada de una licenciatura en diseño de interiores y lo más destacado que hizo fue la de aprovechar los programas institucionales para difundir lo que llamó “valores morales y principios”, en las comunidades indígenas y campesinas de nuestro país, situación por la que se vio obligada a renunciar ante la ola de críticas desatadas en su contra.
Después, en 2009, durante el gobierno de Felipe Calderón, la diseñadora de interiores, Carla Rochín Nieto, exlegisladora federal panista guanajuatense, fue colocada al frente de la Coordinación de Guarderías del Instituto Mexicano del Seguro Social, instancia que se encargaba de la supervisión de las guarderías infantiles de nuestro país, cuando el 5 de junio de 2009, ocurrió el incendio de la Guardería ABC de Hermosillo, Sonora, en donde fallecieron 49 niños y 106 resultaron heridos.
A consecuencia de la tragedia, la licenciada en diseño de interiores fue cesada del cargo, después, en 2010, un informe elaborado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la señaló entre los funcionarios que habrían cometido incumplimiento en sus funciones que causaron la tragedia y, diez años después en 2020, fue detenida por la Fiscalía General de la República
Sin embargo, tras estar encarcelada durante treinta días en el penal de Hermosillo, Sonora, Carla Rochín Nieto, salió de la prisión y actualmente enfrenta en libertad el proceso penal en su contra por el incendio de la Guardería ABC.
En esta misma línea, quien sí continúa tras las rejas es Jaqueline Malinali Gálvez Ruiz, hermana de la abanderada del Frente Amplio por México quien, desde 2012, fue detenida e internada en el penal femenil de Cieneguillas, Zacatecas, por presuntamente pertenecer a la banda de secuestradores Los Tolmex, grupo delictivo que operaba en el Estado de México y en el Distrito Federal.
De acuerdo a las investigaciones realizadas en torno a los delincuentes, Mali, como también es identificada la hermana de Xóchitl Gálvez, era la encargada de poner el dedo, como se define en el argot judicial, a quienes después serían privados de la libertad por la banda de Los Tolmex.
Ahora, la hermana de Jaqueline Malinali Gálvez Ruiz, desde que se convirtió en la abanderada del Frente por México, entusiasta y enfática, dio a conocer la regla de oro sobre lo que espera de sus colaboradores, en caso de ganar la contienda a la presidencia de la República: no habrá lugar para huevones, rateros, ni para… otras personas.
SIC mx