Estamos acá tanto en lo pedagógico como en lo político.
La conciencia de lucha del magisterio oaxaqueño: luchar por el pueblo, porque somos de pueblo.
Por: Andrés Peñaloza Méndez.
Francisca Pérez Martínez, proviene de una familia de bajos recursos, siendo jovencita aprovechó la oportunidad de ingresar al magisterio. Con pocos estudios, pero con enorme dedicación se preparó para la docencia, ejerciéndola a lo largo de cuarenta años.
Suspira cuando se le pregunta sobre su formación y trayectoria magisterial: «Es muy bonito estar con los jóvenes, saber que en nuestras manos está el futuro de México y tener que ponerle mucho entusiasmo para que esos niños aprendan, para que sepan. Hemos trabajado con comunidades indígenas donde al 100 % están hablando mixteco. En comunidades en donde no hay luz, en donde el salón de clases es de carrizo, sin puertas; con pisos de tierra. Cuando llueve pues entra el agua y todo eso. Y, sin embargo, es muy muy bonito esta profesión cuando le tenemos amor y sobre todo amor a los niños. Amor para que salgan adelante».
Imparte clases en una de las telesecundarias de Huajuapan de León, Oaxaca y al igual que miles de sus colegas, participa desde el pasado 15 de mayo en las movilizaciones y en el plantón instalado en el Zócalo de la ciudad de México. «Estamos acá tanto en lo pedagógico como en lo político», dice la orgullosa integrante de la sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), espacio de articulación de las disidencias al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
No es la primera lucha, seguramente tampoco la última en la que participe. Siempre bregando por la democratización sindical, sus derechos laborales y la defensa de la educación pública, gratuita y laica.
Le entristece abandonar su escuela y a sus estudiantes «Nos debemos a ellos y eso lo sabemos. Tenemos que luchar por los derechos de ellos y por los derechos de nosotros».
Se queja por la carencia de recursos para atender adecuadamente a la población escolar. «Tenemos escuelas que no abrieron todo el ciclo escolar, imagínense. Esos niños perdieron el ciclo escolar. Tenemos escuelas con 200 o 250 alumnos, atendidos por un solo maestro. ¿Qué hace un maestro con tantos niños? Solo entretenerlos, la verdad. Y esa es la necesidad que tenemos de nuestros niños y de nosotros mismos de que nos manden más recursos para atender a esa población. Porque considero que todos tienen el derecho de recibir educación. Se ha dicho en todos los medios que los niños son primero, sin embargo, nuestra realidad es otra. Y por eso estamos acá».
¿Y qué siente y piensa de las opiniones contrarias a su lucha?
«Pues es que no están enterados. A lo mejor lo ven muy superficialmente. ¿Por qué viven en la ciudad? ¿Porque tienen luz, porque tienen computadoras, porque tienen medios de transporte? Nuestra realidad es otra y ellos no lo saben. No se han acercado, nada más nos ven, así como bichos raros y ya, ¿no? Pero no se acercan a preguntarnos cuáles son nuestras necesidades, el por qué estamos acá. Nada más se molestan y hasta ahí queda su participación. Sin embargo, viendo de fondo todo lo comentado, pues te das cuenta de que vivimos en pésimas condiciones. No tanto como maestros, sino nuestros alumnos, nuestras comunidades».
Cabecita de algodón, nos partiste el corazón, correaban las y los maestros de la CNTE. ¿Qué espera de este paro?
«Pues espero que el gobierno volteé a vernos. Nosotros, y creo que todo el pueblo mexicano ha tenido muchas expectativas buenas de esta transformación. Sin embargo, en la realidad vemos que esto no ha sucedido. Nos ha pegado, nos ha dolido porque pensamos que el cambio iba a ser para mejorar. Sin embargo, vemos que es más de lo mismo, nada más que ahora el enemigo lo tenemos dentro. Antes estaba bien definido con quién peleábamos y ahorita el enemigo está dentro de casa y eso es lo peor».
Luego de tres años sin interlocución, el 4 de junio, se retomaron las reuniones con la presidencia de la República y la Comisión Nacional Unitaria de Negociación de la CNTE. Trascendieron algunos ofrecimientos gubernamentales mejorando y ampliando las propuestas anunciadas por el presidente López Obrador el día del maestro(a).
Sin embargo, el ambiente de contención social se mantenía. Ese mismo 4 de junio, sobrevendrían acontecimientos represivos como el provocado por un grupo de golpeadores con armas de fuego, palos y machetes en San Juan Bautista La Raya, municipio de Zimatlán de Álvarez, donde intentaron desalojar a los docentes lesionando a siete e hiriendo de bala a un maestro; además de causar destrozos en los vehículos de los paristas. Mientras tanto en el plantón del Zócalo también su producía un connato represivo y al día siguiente se desplazaban hacia la secretaria de gobernación para protestar por la represión ocurrida.
¿Por qué participa en la CNTE y no en el SNTE?
Alfonso Cepeda Salas, líder del SNTE, no es la excepción. Su cercanía con el gobierno y con el partido en el poder, le ha garantizado una senaduría plurinominal. Con anterioridad, fue colaborador cercano de Elba Esther Gordillo y en 2018 apoyó a la coalición Todos por México (PRI-PVEM-Nueva Alianza).
El caso de la CNTE es diferente. Es independiente del gobierno, de los partidos políticos y de las iglesias. Es de los pocos movimientos sociales autónomos sobrevivientes a pesar de represiones (más de 150 muertos), encarcelamientos injustos, infiltrados, cooptación de cuadros y charrazos en secciones democráticas.
«Cuando nosotros como CNTE nos levantamos por el aumento salarial, cuando nos levantamos en contra de las UMAS (Unidad de Medida y Actualización), él pone un desplegado ahí también diciendo que por eso está luchando. Sin embargo, nunca los vemos. Ahorita el premio que le dieron a Cepeda Salas es participar dentro del gobierno como plurinominal. Ese fue el costo de estar arrodillado. Pero no lucha por los derechos de los trabajadores. En cambio, la CNTE, pues aquí nos ve usted, no crea que alguien nos paga. Con nuestro mismo sueldo estamos subrogando ir al baño, ir a comer, ir a bañarnos, estar aquí. Yo la verdad preferiría estar en mi casa. Doy clases de 8 a 14 horas y en la tarde hago otras actividades. Aquí hay que estar todo el día en pésimas condiciones».
Erguida con toda dignidad la maestra Francisca Pérez, expresa la conciencia de lucha característica del magisterio oaxaqueño: «Yo vengo de una comunidad donde mis padres hablan mixteco, no me avergüenzo. Y me han enseñado a luchar, me han enseñado que con dignidad tenemos que sacar adelante los trabajos para el bienestar de nuestra comunidad y de nuestros niños. Amo mi trabajo, es un trabajo muy noble, porque gracias a este trabajo tenemos licenciados, tenemos doctores, tenemos todas las profesiones. Gracias a un maestro tenemos eso. No se nos ha dado como magisterio el lugar que merecemos y nosotros queremos darle ese lugar y esa oportunidad a nuestros niños para que también tengan derecho a salir adelante. No porque hablen mixteco, no porque hablan zapoteco. No tienen derecho de ser un gran profesionista. Tenemos gente inteligente, sin embargo, las condiciones tan pésimas en las que vivimos en las escuelas es lo que hace que esos niños no salgan adelante».
Maestra Francisca, algo más que quisiera añadir.
«Pues nada más pedirle a la sociedad su apoyo, que no se molesten, porque sabemos que interrumpimos sus actividades cotidianas, pero también sabemos que, si no hacemos esta lucha y no salimos a las calles, nadie nos va a hacer caso. Si estamos en nuestra casa nada más viendo cómo nuestros niños tienen las necesidades, viendo cómo nuestros pueblos que pertenecen a nuestra zona no tienen maestros y nos quedamos ahí, no somos empáticos con ellos, entonces pues de nada vale tener esta profesión. Tienes que luchar en bien del pueblo si lo quieres, y nosotros al estar ahí todo el año, todo el ciclo escolar, nos nace ese coraje y ese amor por nuestros niños y luchar por sus derechos. También, no puedo negar que venimos por nuestros derechos, pero también estamos viendo cómo están nuestros niños sin clases. A veces es increíble, cómo vivimos en nuestras comunidades allá en la Sierra de Oaxaca, cómo caminamos, cómo tenemos que cruzar ríos, cómo tenemos que subirnos en lancha para llegar a nuestros centros de trabajo, y lo hacemos, porque queremos nuestra profesión. Entonces yo invito a la sociedad a que se sume a este movimiento, que nos apoye, y yo creo que si los padres de familia que tienen a sus hijos aquí levantaran la voz y exigieran al unísono que el gobierno volteé a vernos, yo creo que el presidente se sentiría presionado y nos apoyaría, luego, luego y no estaríamos tanto tiempo acá».
La entrevista con la maestra Enriqueta Pérez Martínez, se realizó el 28 de mayo. Días antes, ya habían sufrido presiones e insultos de integrantes de partidos políticos con ideología reaccionaria, racista y clasista; así como, campañas mediáticas negativas, adosadas de paparruchas, a las causas del magisterio democrático.
La CNTE, no se doblegó con las mareas rosas y guindas en sus cierres de campañas y celebraciones. Defendieron el derecho de manifestación y protesta más allá de la esfera electoral en los espacios públicos. Un genuino contrapeso social a los poderes fácticos.
Al corte de este texto, la sección 22 de la CNTE empieza a discutir en asamblea permanente si se aceptan los ofrecimientos del gobierno de Oaxaca a su pliego de demandas. En principio el acuerdo es realizar un repliegue táctico en Oaxaca y reiniciar clases el lunes 10 de junio. En el plano nacional la lucha de la CNTE se mantiene con la exigencia de la abrogación de la ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado de 2007, así como la reforma educativa peñista.
Probablemente, el 11 de junio, fecha de reunión de la Asamblea Nacional Representativa de la CNTE, se sabrán los detalles de las respuestas gubernamentales a las demandas magisteriales.
Por lo pronto, en la conferencia de prensa de Claudia Sheinbaum, presidenta electa, este lunes 10 de junio, tras su reunión con el presidente Obrador, anunció que trabajaran en algunas de las peticiones del magisterio, como revertir los aspectos negativos de la reforma a la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado de 2007.
Sin duda, uno de los logros de la Jornada Nacional de Lucha de la CNTE, iniciada el 1 de mayo, y de cuyos saldos daremos cuenta en una próxima entrega.
SIC mx
